La Almazara cooperativa, fue fundada en el año 1964 para dar salida a un aceite, cuyas características físico-químicas y organolépticas son reconocidas por todos los entendidos en el mundo del aceite.
Sus instalaciones cuentan con la más moderna maquinaria para la recepción y elaboración del aceite, fruto obtenido de la aceituna aportada por sus más de 1000 socios. Olivares entre montes y jaras, con pendientes que superan el 10% de desnivel, pero cuidados con el máximo esmero del agricultor.
UN ACEITE CON HISTORIA
La Almazara cooperativa, fue fundada en el año 1964 para dar salida a un aceite, cuyas características físico-químicas y organolépticas son reconocidas por todos los entendidos en el mundo del aceite.
Sus instalaciones cuentan con la más moderna maquinaria para la recepción y elaboración del aceite, fruto obtenido de la aceituna aportada por sus más de 1000 socios. Olivares entre montes y jaras, con pendientes que superan el 10% de desnivel, pero cuidados con el máximo esmero del agricultor.
El proceso de selección y molturación de la aceituna del árbol, la catalogación de los aceites por el Panel de Cata de la Denominación de Origen Montes de Toledo, y los análisis físico-químicos que se realizan en laboratorio acreditado, aseguran y certifican la venta de un aceite de calidad superior.
Situada en la Nava de Ricomalillo (Toledo), a una altitud de 671m sobre el nivel del mar, en las estribaciones de los Montes de Toledo, Comarca de la Jara, y actualmente formada por la fusión de las cooperativas de Buenasbodas, Campillo y la Nava de Ricomalillo, la variedad predominante del olivo es la Cornicabra.